No hay palabras lo suficientemente grandes para describir lo que se siente el “volver”. O será al menos como lo vivo yo según cada ocasión. Hace ya unos meses, tuve de esas sacudidoras experiencias. Fue como un huracán de emociones por capas… De Yogyakarta a Jakarta. De Jakarta a Madrid. Mi primer regreso fue a Madrid, mi casita de adopción. Que tu amigo te vaya a buscar, te hable en tu idioma –bueno, o parecido– luego de tanta abstinencia y te lleve “a casa”. Donde hay una cama, “tu” cama, que te espera en “tu” habitación… sin palabras. La felicidad del retorno de los quesos en el plato. Cómo explicar la sensación del señor pan –el de verdad– con aceite... Read More →
↧